Remedio de medianoche: sopa de murciélago

Hechos de la sopa de murciélago

Dónde: La sopa de murciélago es popular en todo el extremo oriental de Asia
Sabor: Depende de la última comida del prisionero – a menudo arpía
Sugerencia de servir: Si no puede soportar el murciélago crudo recién sacrificado, pruébelo en una deliciosa sopa recién preparada
Hecho: El famoso roquero Ozzy Osbourne mordió una vez la cabeza de un murciélago vivo en el escenario

Una de las delicias de Camboya es la sopa de murciélago, muy popular en el distrito de la provincia de Kandal. Como muchos platos asiáticos, a esta sopa en particular se le atribuyen cualidades medicinales y a veces se consume como remedio para ciertas dolencias. Por ejemplo, se dice que la presencia de sangre de murciélago en la sopa ayuda a los trastornos respiratorios y, si se tiene la suerte de que se incluyan globos oculares, éstos ayudarán a curar cualquier problema de la vista que se pueda tener.

Sugerencia de servicio

En los restaurantes locales, la sopa se prepara de forma muy parecida a como se prepararía un plato de langosta fresca en una marisquería del Mediterráneo. El camarero le presentará una jaula de murciélagos vivos entre los que podrá elegir la criatura peluda y chillona que desee comer. El murciélago puede pedirse cocido, en forma de sopa, o comerse crudo. Si es lo suficientemente valiente como para pedirlo crudo, la preparación del murciélago se hace justo delante de usted, incluyendo el sacrificio y el despellejamiento, lo que puede hacer que desee saber cómo decir «tengo náuseas» en jemer (pruebe con «kh’nyohm jawng k’uat»). Si se pide cocinado, el murciélago elegido se lleva a la cocina, donde se transforma en una deliciosa sopa.

Una vez superado el traumatizante concepto de lo que se está comiendo exactamente, ¡el murciélago puede ser muy sabroso! Los comensales frecuentes dicen que cada vez es una nueva experiencia culinaria, ya que el plato tendrá un fuerte aroma y sabor influenciado por lo que los murciélagos han estado comiendo antes de su prematura muerte.

¡Digo camarero, hay un murciélago en mi sopa!

Simplemente echando los murciélagos vivos en una gran olla de agua hirviendo se inicia la sopa. A continuación, se añade un poco de jengibre acompañado de una gran cebolla picada con sal y pimienta al gusto. Después de tres cuartos de hora aproximadamente, se sacan los murciélagos y se les quita la piel. Toda la carne, y cualquier otra parte interesante, en función de los dolores particulares del día, se retira del hueso y se devuelve al caldo. Una vez calentada, la sopa se vierte en tazones y se sirve con guarniciones de cebolla, salsa de soja y crema de coco. Se puede regar con un poco de sangre de murciélago y vino de arroz o con la cerveza local Angkor. Buen provecho

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